¿Cómo alguien que maneja los edificios o las instalaciones de una compañía puede impactar de manera positiva a las personas que en él trabajan?
Genzyme
Con frecuencia nos hacemos la pregunta anterior y esa cuestión siempre está en la mente de un facility manager, ya que trabajar con sistemas y equipos, parece ser una ocupación un poco lejana del grupo humano que convive en un espacio, sin embargo, la realidad es que cada vez más el trabajo de manejar inmuebles requiere de una concepción integral acerca de lo que en ellos ocurre, pues la experiencia de quienes conviven y usan los espacios va directamente relacionada a la productividad que se puede tener.
Si en épocas anteriores los indicadores de gestión se centraban principalmente en el desempeño técnico de los sistemas, hoy en día, aunque eso es importante, el centro de las mediciones debe girar hacia la experiencia del usuario final y sus emociones en un espacio, lo cual lleva al bienestar del mejor capital humano posible. Por nuestra parte, en Accuro hemos profesado la filosofía del respeto por el ser humano como eje de la cultura de las organizaciones y hemos dirigido nuestro trabajo para lograr que las personas conecten de manera positiva con los lugares en los cuales desarrollan sus actividades. Por eso, como premisa fundamental la integralidad se convierte en un pilar altamente valioso dentro de nuestra gestión, pues al ser globales y estar presentes en cada una de las fases del ciclo de vida de un activo, partiendo de la conceptualización, diseño y construcción de un espacio (oficina, edificio, local) hasta su monitoreo, mantenimiento y renovación, traducimos la cultura a espacios y promovemos el bienestar y satisfacción de sus habitantes.
Por lo anterior, es indispensable manejar de manera integral el activo inmobiliario entendiendo su ciclo de vida y cómo al ser un “entidad viva”, va cambiando con el paso del tiempo y con los diferentes grupos humanos que en él habitan, ya que comprender la necesidad de un usuario y cumplirla, no es suficiente, y se requiere generarle una experiencia que integre sus emociones y sentimientos en el proceso, lo que le permita conectarse con el espacio. De esta manera, las conexiones responden inicialmente a la cultura corporativa representativa de cada espacio y también a la integración de indicadores de gestión destinados al control de sistemas, como también a la satisfacción, seguridad y bienestar de los habitantes de un lugar corporativo o comercial.
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